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Nutrición: animales exóticos y de zoológico

PorJoeke Nijboer, PhD, Nijboer Consultancy
Revisado/Modificado ago 2020

El campo de la nutrición de animales exóticos y de zoológico continúa haciendo avances que dan como resultado una mejor alimentación. Los nutricionistas de animales exóticos en los zoos y la industria alimentaria están estudiando los problemas y generando información sobre el manejo nutricional apropiado de muchas especies.

Todos los animales necesitan nutrientes y energía en una forma metabolizable. Estos nutrientes y la energía deben estar adecuadamente equilibrados y en la forma física correcta para acomodarse a los gustos, sistemas digestivos y métodos de alimentación particulares. Por ejemplo, los grandes loros suelen usar sus patas para sostener el alimento, mientras que otras especies lo obtienen o lo colocan usando otros apéndices (o no lo manipulan en absoluto). Si se administra un granulado comercial extruido, los trozos han de ser lo suficientemente grandes como para que el ave pueda agarrarlos fácilmente; las piezas deben tener un diámetro de al menos 10 mm.

Las dietas para animales exóticos y de zoológico se han desarrollado mediante:

  • experiencia práctica

  • hábitos alimentarios en la naturaleza

  • morfología del tracto oral y gastrointestinal

  • investigación nutricional de especies exóticas en estado salvaje y cautividad

  • necesidades nutricionales establecidas para los animales domésticos y de laboratorio y las personas.

  • informes de literatura anecdótica (p. ej., estudios de casos)

  • estado fisiológico del animal (p. ej., joven, viejo, preñado, etc.)

  • puntuación de la condición corporal

Los criterios fundamentales para evaluar la idoneidad de un alimento para una especie dada son el crecimiento, el éxito reproductivo y la longevidad.

Las necesidades nutricionales mínimas establecidas por el National Research Council (NRC) para animales domésticos y de laboratorio pueden ser puntos de partida útiles para establecer los objetivos de niveles nutricionales para una especie exótica. Por ejemplo, Nutrient Requirements of Small Ruminants, publicado por NRC en 2007, contiene información nutricional sobre los cérvidos (ciervo de cola blanca, ciervo rojo, uapití y caribú) y camélidos (llamas y alpacas). Las pautas nutricionales también han sido establecidas por grupos especializados en nutrición de animales exóticos (p. ej., grupos especializados de organizaciones de zoológicos). No toda la información nutricional anecdótica está científicamente verificada, y en caso de utilizarla, solo deberían hacerlo profesionales especializados, como los nutricionistas de animales exóticos.

Para muchas especies exóticas que tienen analogías muy cercanas con especies domésticas, los alimentos pueden formularse para que contengan los nutrientes que cubrirían las necesidades de los ungulados, mustélidos, cánidos, félidos, roedores, primates, lagomorfos, gallináceas, aves anseriformes y peces. Sin embargo, las necesidades nutricionales establecidas por el NRC deberían ser cantidades mínimas y utilizarse solo como directrices, ya que los objetivos de los ganaderos al alimentar a sus animales son una rápida y eficiente ganancia de peso y una elevada producción de leche o huevos, objetivos que son distintos de los propios del manejo de los animales en un zoológico. En los zoológicos y otras colecciones de animales exóticos, se debe proporcionar en general un alimento de mantenimiento, aunque a veces puede ser necesario un alimento de cría u otro específico, según el animal y las circunstancias.

Aunque los requerimientos del NRC son menos aplicables directamente a otras especies, pueden servir todavía como una referencia general para evaluar la adecuación nutricional en la mayoría de las aves y mamíferos. La formulación y evaluación de los alimentos para reptiles y anfibios es incluso más difícil porque no hay modelos animales domésticos y porque los ritmos metabólicos de los animales poiquilotermos fluctúan con los cambios de la temperatura ambiente. Una vez que se han establecido las concentraciones de nutrientes de la ración, deben seleccionarse los tipos y cantidades de ingredientes, los métodos de presentación y las frecuencias de consumo, basándose en los atributos físicos y de comportamiento de las especies.

Es importante que todo alimento sea de buena calidad. Los alimentos en mal estado o enmohecidos, o los alimentos conservados durante periodos prolongados (p. ej., >1 año para la mayoría de los alimentos en bolsas, 3-6 meses para los granulados y 6-12 meses para la mayoría de los alimentos congelados), no deben administrarse. La práctica de llenar el comedero hasta arriba todos los días o cada dos días debe desaconsejarse porque los restos de alimento en el fondo pueden echarse a perder. Los comederos y bebederos deben limpiarse a fondo antes de reponer la comida o el agua. Siempre debe proporcionarse agua limpia y fresca a las especies no marinas. Se suelen poner bloques, ladrillos o "carretes" de sal con oligoelementos a disposición de los ungulados, psitácidos y algunos roedores.

Una alimentación tipo "bufé libre" está completamente desaconsejada, ya que los animales en cautividad raramente eligen una dieta equilibrada si se les ofrece una amplia selección de alimentos. Por lo general, la mayor parte de la dieta debe estar constituida por un alimento comercial nutricionalmente completo o una mezcla casera que no pueda separarse, en la que los componentes como carne, frutas y semillas solamente representen un pequeño porcentaje. Los alimentos granulados son especialmente importantes en las psitácidas, para evitar la selección de semillas deficientes en calcio.

Para mejorar el consumo de alimentos granulados, el suministro debe hacerse por la mañana, ofreciendo los demás alimentos durante el resto del día. Todos los componentes de la ración suministrada deben pesarse y registrar el consumo real.

La carnes de músculos y órganos, las frutas, la mayoría de los granos y semillas y la mayoría de los insectos son pobres fuentes de calcio, y el consumo en exceso puede producir una carencia de calcio. A los insectos se les debe suministrar alimentos que contengan al menos 12-15 % de calcio para realizar una carga intestinal de calcio. También es posible empolvarlos con un suplemento equilibrado de calcio y fósforo; sin embargo, es dudoso que esto pueda añadir suficiente calcio a la ración. Otras fuentes de calcio incluyen conchas de ostra, hueso de sepia y tabletas de carbonato de calcio molido.

La obesidad es más común que el consumo inadecuado de nutrientes. Los ungulados, primates y carnívoros pueden llegar rápidamente al sobrepeso cuando se les ofrecen cantidades excesivas de alimentos de gran calidad, particularmente cuando la actividad física es limitada. En algunas aves (p. ej., ratites, aves acuáticas), un rápido ritmo de crecimiento aumenta la incidencia de problemas en patas y alas. Tanto los animales adultos como en crecimiento deben pesarse periódicamente para controlar los cambios. Si no es posible pesar cuatro veces al año, se debe realizar una evaluación de la condición corporal.

Si se contempla un cambio de alimento a causa de una sospecha de desequilibrio nutricional, déficit o intoxicación, primero debe evaluarse el alimento que se está suministrando para establecer sus concentraciones de nutrientes. Entonces pueden hacerse cambios de ingredientes o nutrientes basándose en la corrección de una sospecha o de un problema de salud confirmado. Para los animales exóticos en cautividad, establecer y mantener un historial de alimentación puede ser particularmente útil en la evaluación de la salud. Los patrones de actividad individual también son importantes (p. ej., la arteriosclerosis es relativamente común en aves obesas).

Para evitar "cambios en la dieta" (cambios en la dieta consumida porque no se pesa regularmente), la ingesta dietética (peso del alimento menos las sobras) debe determinarse al menos 3 veces al año.

El cuidador del animal y dos expertos independientes, como un veterinario y un nutricionista, han de registrar también 3 veces al año la puntuación de la condición corporal y la puntuación fecal. También debe registrarse el estado general del animal (gestante, mayor, enfermo, etc.).

Suplementos nutricionales para animales exóticos y de zoológico

El uso de suplementos nutricionales se está haciendo cada vez más popular entre los cuidadores de animales. Aunque muchos cuidadores y propietarios de animales de compañía usan alimentos nutricionalmente completos que no requieren suplementación, todavía se ofrecen suplementos a menudo. El contenido de nutrientes de la ración en uso debe establecerse o estimarse antes de decidir si se necesita algún suplemento o si un suplemento debe retirarse. Desafortunadamente, las raciones rara vez se evalúan primero para determinar qué nutrientes (si es que hay alguno) están desequilibrados.

Si un nutriente es deficitario en una ración, debe recomendarse un suplemento específico en una cantidad específica. La suplementación excesiva de algunos nutrientes (p. ej., algunas vitaminas liposolubles, selenio, cobre) puede ser tan nociva como el déficit debido a la intoxicación y el desequilibrio nutricional. La alimentación a base principalmente de productos de cereales y frutas y verduras cultivadas puede hacer necesaria la suplementación con micronutrientes; sin embargo, los suplementos son muy variables en su composición.

Agua para animales exóticos y de zoológico

El consumo de agua debe comprobarse rutinariamente, con especial atención en los animales con función renal comprometida, en lagartos o aves propensos a padecer gota y en animales sometidos a condiciones de alta temperatura o baja humedad en las que pueden esperarse pérdidas por evaporación. El contenido de sal del agua debe conocerse porque algunas especies son menos tolerantes que otras. Los animales mantenidos con alimentos secos (granulados, extrusionados, heno, etc.) requieren más agua que aquellos que consumen alimentos suculentos. El agua potable debe estar disponible para consumo a voluntad.

Muchos animales en la naturaleza consumen gran parte del agua que necesitan en los alimentos que comen. Con el consumo de alimentos bajos en humedad (granulados, extrusionados, etc.), algunos animales, según cómo se ofrezca el agua de bebida, puede que no sean capaces de mantener una adecuada hidratación. Muchos lagartos tropicales pequeños en libertad consumen agua de los alimentos y lamiendo las gotas que se acumulan después de la lluvia. Cuando están en cautividad, con frecuencia no beben fácilmente de los bebederos. En la naturaleza, las aves de presa no beben; sin embargo, en cautividad, a veces lo hacen según las circunstancias, por lo que debe haber agua potable disponible en todo momento.

La humedad puede ser especialmente importante para mantener la hidratación de muchos reptiles, sobre todo de especies tropicales. La nebulización diaria con agua templada es una fuente importante de hidratación para algunos lagartos que no pueden observarse bebiendo agua. Las lesiones oculares en tortugas semiacuáticas (p. ej., tortugas de caja) y algunos galápagos pueden ser el resultado de una baja humedad ambiental (o una posible enfermedad de las vías respiratorias superiores) y no una carencia de vitamina A. La conjuntivitis puede responder mejor a una terapia con antibióticos de apoyo y mayor humedad que a la suplementación con vitamina A. Los historiales dietéticos pueden ser de especial importancia en tales casos, porque muchas tortugas en cautividad se alimentan con alimentos comerciales, que son mayoritariamente piensos para gatos con elevado contenido de vitamina A.

Véase también una discusión sobre la nutrición de animales huérfanos.

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