Los caballos pueden presentar un desequilibrio de los cascos en el plano sagital (de delante hacia atrás) o en el plano mediolateral, y ambos tipos de desequilibrio pueden afectar tanto a las patas delanteras como a las traseras. Estos desequilibrios pueden provocar un bajo rendimiento o cojera. La conformación de las extremidades, las heridas o lesiones en las extremidades distales y un herrado o recorte deficientes pueden provocar estos desequilibrios.
Los desequilibrios del casco en el plano sagital se describían históricamente en términos de angulación con respecto a la articulación interfalángica distal (articulación interfalángica distal). Por ejemplo, un caballo "quebrado hacia delante" muestra un casco erguido y puede tener pie zambo. Un caballo "quebrado hacia atrás" puede mostrar una conformación de dedos largos o de talón bajo, y muchos caballos quebrados hacia atrás tienen un ángulo palmar/plantar negativo en las radiografías; consultar la imagen sagital de desequilibrio del casco.
La exploración física del pie, incluidas las superficies dorsal, palmar/plantar y solar, puede ser útil para identificar desequilibrios del casco. También puede ser útil el examen dinámico con el caballo caminando en la mano.
La radiografía del pie puede ayudar en la evaluación del desequilibrio del casco; deben tomarse radiografías dorsopalmar y lateromedial. Es importante que la vista dorsopalmar sea en línea recta, con el caballo soportando el peso uniformemente y con la extremidad vertical y por debajo del cuerpo del caballo; los artefactos de una carga de peso desigual siguen siendo comunes con esta vista.
En muchos caballos, los cambios en el recorte y el herrado pueden ayudar a corregir los desequilibrios de los cascos. Sin embargo, no todos los desequilibrios del casco requieren tratamiento, ya que muchos son de origen conformacional. En caballos sin cojera, los cambios drásticos en el recorte o el herraje pueden provocar cojera.
