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Enteritis ulcerativa en aves de producción

(enfermedad de la codorniz)

PorRocio Crespo, DVM, MSc, DVSc, DACPV, Department of Population Health and Pathobiology, College of Veterinary Medicine, North Carolina State University
Revisado/Modificado Modificado oct 2024
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La enteritis ulcerativa es causada por una infección por Clostridium colinum. Afecta principalmente a codornices jóvenes, aunque también a otras especies de aves domésticas y silvestres. Los signos clínicos incluyen diarrea acuosa o hemorrágica, letargo, anorexia y muerte súbita. Los signos son menos graves en pollos y en aves de caza que no sean codornices. El diagnóstico presuntivo se basa en la evaluación macroscópica e histológica, mientras que el diagnóstico definitivo se realiza mediante la detección de C. colinum por cultivo bacteriano y ensayo de PCR. El tratamiento con estreptomicina es eficaz y la bacitracina en el alimento puede utilizarse como medida preventiva.

La enteritis ulcerativa es una enfermedad contagiosa causada por Clostridium, que afecta a aves domésticas y silvestres. Se diagnosticó por primera vez en la codorniz colín norteña (Colinus virginianus) y también se conoce como enfermedad de la codorniz. Es una enfermedad de gran impacto económico en la producción avícola debido a sus altas tasas de mortalidad.

Etiología y patogenia de la enteritis ulcerativa en aves de producción

Clostridium colinum es el agente causal de la enteritis ulcerativa. Es una bacteria anaerobia, de difícil cultivo, grampositiva, formadora de esporas, con forma de bacilo ligeramente curvado de aproximadamente 1 × 3-4 μm de ancho con esporas ovaladas de ubicación subterminal.

La enteritis ulcerativa es altamente contagiosa. Para inducir la enfermedad de manera experimental en codornices colín norteñas, se deben administrar más de 106 células bacterianas viables por vía oral. En cambio, los pollos que reciben una cantidad similar de bacterias no desarrollan la enfermedad.

Después de la infección por vía oral, la bacteria se adhiere a las vellosidades intestinales, lo que provoca enteritis y úlceras en segmentos del intestino delgado y la parte superior del intestino grueso. Los bacilos migran al hígado a través de la circulación portal y producen focos necróticos que más tarde se funden en una extensa necrosis hepática. Los infartos del bazo son frecuentes.

Aunque las pruebas de toxigenicidad en los ratones han sido negativas, se ha sugerido que una toxina producida in situ podría desempeñar un papel en la patogenia de la enteritis ulcerativa, pero no se ha demostrado.

Epidemiología de la enteritis ulcerativa en aves de producción

La enteritis ulcerativa se diagnosticó por primera vez en la codorniz colín norteña (Colinus virginianus). La enfermedad no solo afecta a las codornices, sino también a pollos, pavos, faisanes, urogallos y otras aves gallináceas. Las codornices colín norteñas son las más susceptibles a la infección. Además, se han reportado casos en palomas, psitácidas y codornices japonesas (Coturnix coturnix japonica).

En las codornices Coturnix, la infección por Clostridium perfringens puede provocar una enfermedad similar a la enteritis ulcerativa.

Una alta densidad poblacional es un factor predisponente para el desarrollo de la enfermedad. En pollos, la enteritis ulcerativa forma parte de un complejo multifactorial asociado con estrés, coccidiosis, enfermedad de la bolsa sinovial y otros factores predisponentes.

La enteritis ulcerativa se produce en todo el mundo.

Las aves que desarrollan la enteritis ulcerativa crónica o se han recuperado de la enfermedad permanecen como portadoras de por vida. Las aves infectadas liberan las bacterias en sus excrementos. La infección puede introducirse a través de moscas que se alimentan de material fecal contaminado o por aves recuperadas que permanecen como portadoras.

La mayoría de los casos de enteritis ulcerativa se reportan en poblaciones cautivas de codornices colín norteñas, lo que sugiere que el manejo y las condiciones de cría influyen en la incidencia de la enfermedad.

Las esporas de Clostridium colinum pueden sobrevivir en las instalaciones durante meses. Se han aislado bacterias Clostridium spp. en muestras de agua extraídas de tuberías de bebederos con presencia de biofilm y depósitos minerales.

Perlas y trampas

  • Se han aislado bacterias Clostridium spp. en muestras de agua extraídas de tuberías de bebederos con presencia de biofilm y depósitos minerales.

En las codornices colín norteñas afectadas, la tasa de mortalidad por enteritis ulcerativa es muy alta y alcanza casi el 100 % en solo 2-3 días. En contraste, la mortalidad en pollos rara vez supera el 10 %.

Hallazgos clínicos de la enteritis ulcerativa en aves de producción

La enteritis ulcerativa puede presentarse en forma aguda o crónica.

En las codornices colín norteñas, la forma aguda provoca muerte súbita sin signos clínicos ni pérdida de peso. Las lesiones agudas incluyen enteritis hemorrágica del duodeno.

En pollos y otras aves de caza, la enfermedad tiene un curso menos grave y se manifiesta con anorexia. Los pollos afectados suelen recuperarse en 2-3 semanas.

Los signos clínicos de la enteritis ulcerativa son similares a los de la coccidiosis e incluyen letargo, postura encorvada, plumaje erizado, diarrea y, en algunos casos, excrementos sanguinolentos o acuosos de color blanco, especialmente en codornices en las formas prolongadas de la enfermedad.

Lesiones

En las primeras etapas de la enfermedad, las lesiones más comunes incluyen úlceras pequeñas y redondeadas rodeadas de hemorragias en el intestino delgado, los ciegos y la parte superior del intestino grueso (ver imágenes de úlcera y hemorragia). Las pequeñas úlceras después se unen para formar unas úlceras mayores, a veces perforantes, lo que produce peritonitis local o difusa.

Al igual que en la coccidiosis, la enteritis ulcerativa provoca presencia de sangre en el tracto digestivo. Las lesiones predominantes en el parénquima hepático son unos focos necróticos característicos de color amarillo a gris. La esplenomegalia con hemorragia y necrosis puede estar presente.

Diagnóstico de la enteritis ulcerativa en aves de producción

  • Evaluación macroscópica e histológica

  • Cultivo bacteriano.

  • Ensayo de PCR

Las lesiones post mortem, como ulceraciones intestinales y lesiones hepáticas necróticas de color amarillo a gris, respaldan el diagnóstico de enteritis ulcerativa. El Clostridium colinum, que aparece de forma aislada como bacilos en forma de bastón, es visible en frotis de lesiones hepáticas e intestinales teñidos con Gram. En aves con bacteriemia, el microorganismo también puede encontrarse en muestras de sangre y frotis esplénicos.

Diferenciar la enteritis ulcerativa de la coccidiosis puede ser difícil, ya que ambas enfermedades suelen presentarse al mismo tiempo. Entre los diagnósticos diferenciales, se incluyen la enteritis necrótica y la histomoniasis; sin embargo, las lesiones hepáticas de la enteritis ulcerativa permiten distinguirla de estas enfermedades.

C. colinum puede aislarse a partir de muestras de hígado cultivadas en condiciones estrictamente anaeróbicas mediante un medio prereducido de sangre-glucosa-levadura con un 8 % de plasma de caballo añadido. La identificación del microorganismo puede realizarse mediante pruebas bioquímicas convencionales, espectrometría de masas de desorción/ionización láser asistida por matriz con tiempo de vuelo (MALDI-TOF MS) y prueba de PCR.

Prevención, tratamiento y control de la enteritis ulcerativa en aves de producción

  • La bacitracina como medida preventiva

  • La estreptomicina como tratamiento

La bacitracina en el alimento (220 g/tonelada o 200 g/tonelada corta) actúa como un preventivo general contra enfermedades clostridiales, incluida la enteritis ulcerativa en codornices. La estreptomicina es un tratamiento eficaz cuando se administra en una concentración del 0,006 % en el alimento o 0,26 g/l en el agua.

El control de la enteritis ulcerativa se basa en buenas prácticas de manejo, que incluyen:

  • Evitar factores predisponentes, como la coccidiosis y la alta densidad poblacional.

  • Evitar la introducción de aves nuevas en bandadas establecidas.

  • Minimizar la transmisión fecal-oral mediante el uso de jaulas en la cría de codornices.

  • Retirar inmediatamente las aves enfermas o muertas.

  • Realizar una limpieza profunda de las instalaciones entre lotes.

  • Implementar control de plagas dentro y alrededor de las instalaciones.

  • Tratar periódicamente los sistemas de agua con productos seguros que eliminen los depósitos minerales y las biopelículas.

  • Cumplir con los tiempos de retiro y normas de residuos en aves destinadas al consumo humano, según la normativa local.

Conceptos clave

  • Un signo clave de la enteritis ulcerativa aguda en codornices colín norteñas es la muerte súbita, sin signos previos, y una alta tasa de mortalidad, que puede alcanzar casi el 100 % en solo 2-3 días.

  • Las lesiones más importantes observadas en la necropsia son úlceras intestinales profundas, visibles desde la superficie serosa.

  • La rápida eliminación de las aves muertas es una importante medida de control.

  • La enteritis ulcerativa se propaga rápidamente por toda la colonia. El tratamiento debe iniciarse de inmediato para evitar grandes pérdidas de aves.

Para más información

  • Boulianne M, Uzal, FA, Opengart K. Clostridial diseases. In Swayne DE, ed. Boulianne M, Logue CM, McDougald LR, Nair V, Suarez DL, assoc. eds. Diseases of Poultry. 14th ed. Wiley Blackwell; 2020:966-994.

  • Smith, JS. Clostridial diseases. En: Brugère-Picoux J, Vaillancourt J-P, Shivaprasad HL, Venne D, Bouzouaia M, eds. Manual of Poultry Diseases. AFAS; 2015:342-351.

  • Cooper KK, Songer JG, Uzal FA. Diagnosing clostridial enteric disease in poultry. J Vet Diagn Invest. 2013;25(3):314-327.