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Histomoniasis en aves de producción

(enfermedad de la cabeza negra, enterohepatitis infecciosa)

PorRobert Beckstead, PhD, Ceva Animal Health
Revisado/Modificado Modificado mar 2024
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El protozoo Histomonas meleagridis infecta a una amplia gama de aves gallináceas y causa histomoniasis (enfermedad de la cabeza negra). Los pollos suelen ser portadores subclínicos, pero la tasa de mortalidad en los pavos suele ser del 80 %-100 %. Los signos clínicos incluyen caída de la cabeza y las alas, postura erguida durante mucho tiempo, ojos cerrados, plumas erizadas, emaciación y heces de color amarillo azufre. El diagnóstico se basa en la ulceración patognomónica del ciego y las lesiones necróticas en el hígado. No existen tratamientos ni vacunas aprobados.

Etiología de la histomoniasis en aves de producción

Histomonas meleagridis, un parásito protozoario anaerobio del orden Trichomonadida, es el agente causal de la histomoniasis (enfermedad de la cabeza negra). Puede existir en forma flagelada (8-15 μm de diámetro) y ameboide (8-30 μm de diámetro).

H. meleagridis se transmite principalmente en el huevo del nematodo cecal, Heterakis gallinarum. Los pollos y otras aves gallináceas actúan como reservorios de H. gallinarum. Los huevos de nematodos infectados con H. meleagridis permanecen viables en el medioambiente durante años.

Tres especies de lombrices de tierra pueden actuar como hospedadores paraténicos de larvas de H. gallinarum que contienen H. meleagridis. Los pollos y pavos que consumen estas lombrices de tierra pueden infectarse tanto con H. gallinarum como con H. meleagridis.

En pavos, la transmisión por contacto cloacal directo con aves infectadas o a través de heces frescas da como resultado la rápida propagación de H. meleagridis en todo el lote.

Históricamente, se ha considerado que la histomoniasis afecta a los pavos, y causa pocos daños a los pollos. Sin embargo, los brotes en pollos pueden causar morbilidad y tasas de mortalidad moderadas. Las lesiones hepáticas tienden a estar ausentes o son menos graves en los pollos, pero pueden implicar infecciones bacterianas secundarias. En la mayoría de los casos, los pollos se recuperan de los signos clínicos pero permanecen como portadores, mientras que los pavos mueren a causa de la infección.

Hallazgos clínicos de la histomoniasis en aves de producción

Los signos clínicos de la histomoniasis (ver imagen de signos clínicos de histomoniasis) son evidentes en los pavos entre 7 y 12 días después de la infección e incluyen lo siguiente:

  • Apatía

  • Disminución del apetito

  • Alas caídas

  • Plumas descuidadas

  • Heces amarillas en las etapas posteriores de la enfermedad

El nombre coloquial de la enfermedad, "cabeza negra", es engañoso; las aves no presentan una cabeza cianótica.

Perlas y trampas

  • El nombre coloquial de la enfermedad, "cabeza negra", es engañoso; las aves no presentan una cabeza cianótica.

Las aves jóvenes tienen un curso más agudo de la enfermedad y mueren a los pocos días de la aparición de los signos clínicos. Las aves adultas pueden presentar la enfermedad durante algún tiempo, además de demacración pronunciada antes de la muerte.

Lesiones

Las lesiones primarias de la histomoniasis se encuentran en el ciego, donde el parásito migra hacia la submucosa y la capa muscular de la mucosa (ver imagen de progresión de la histomoniasis). Esto conduce a la inflamación y al desarrollo de un exudado caseoso de color verde amarillento o, en etapas posteriores, a un núcleo caseoso seco. A veces, estas úlceras erosionan la pared del ciego, causando peritonitis y afectación de otros órganos.

Los signos clínicos en los ciegos son evidentes de 3 a 4 días después de la invasión de H. meleagridis. Las histomonas pueden llegar al hígado a través del aparato cardiovascular o de la cavidad peritoneal (ver imagen de lesiones hepáticas).

Las lesiones hepáticas son altamente variables en su apariencia; sin embargo, las lesiones grandes y umbilicadas (a menudo descritas como lesiones en "diana" o "objetivo") son típicas y sugieren fuertemente histomoniasis. En pavos, las lesiones hepáticas aparecen de 6 a 8 días después de la infección y pueden llegar a tener hasta 4 cm de diámetro e involucrar todo el órgano. En algunos casos, el hígado se verá verde o marrón. Las lesiones también están presentes en otros órganos, como los riñones, la bolsa de Fabricio, el bazo y el páncreas.

Diagnóstico de la histomoniasis en aves de producción

  • Ensayo de PCR

  • Examen microscópico del contenido del ciego, o de raspados del ciego o del hígado (ver imagen de Histomonas meleagridis).

  • Examen histológico del tejido hepático o del ciego.

Las lesiones hepáticas y del ciego juntas son patognomónicas. La tinción de hematoxilina y eosina es suficiente para el examen histológico.

Para diagnosticar la histomoniasis, las lesiones hepáticas deben diferenciarse de las de las siguientes enfermedades:

Las histomonas son extracelulares, aunque pueden estar tan estrechamente agrupadas que aparentan ser intracelulares. Los núcleos son mucho más pequeños que los de las células del hospedador, y el citoplasma está menos vacuolado. Las especies de Histomonas deben diferenciarse de otros flagelados del ciego.

Prevención y tratamiento de la histomoniasis en aves de producción

  • La cría de pavos debe realizarse por separado de otras aves galliformes.

  • La instalación para pavos debe dividirse con barreras.

Debido a que los pollos sanos y las aves de caza a menudo son portadoras del vector nematodo cecal, se debe evitar cualquier contacto entre pavos y otras aves galliformes, y se debe tener cuidado para reducir la población de H. gallinarum para prevenir la histomoniasis.

  • Los huevos de H. gallinarum del suelo contaminado pueden ser transportados al interior por los trabajadores, lo cual causa la infección.

  • Los artrópodos como las moscas pueden ser vectores mecánicos.

  • Como los huevos de H. gallinarum pueden sobrevivir en el suelo durante muchos meses o años, no deben llevarse los pavos a zonas contaminadas por pollos.

Las histomonas que se desprenden directamente al medio ambiente mueren con rapidez. Por lo tanto, en una instalación de pavos, donde H. gallinarum es incapaz de completar su ciclo biológico, no es necesaria la desinfección.

La inmunización ha tenido solo un éxito parcial en el control de la histomoniasis, y los informes difieren en cuanto a su efectividad. La respuesta inmunitaria de los pavos a H. meleagridis vivo y atenuado requiere 4 semanas para desarrollarse. Se ha demostrado que la vacunación de pollitos de 18 semanas 5 semanas antes de la infección experimental previene la disminución en la producción de huevos. Las histomonas muertas estimulan cierta inmunidad cuando se administran por vía subcutánea (SC) o intraperitoneal (IP), pero no ofrecen protección.

Actualmente, no existe ningún fármaco aprobado para su empleo como tratamiento para la histomoniasis. Históricamente, los nitroimidazoles como el ronidazol, el ipronidazol y el dimetridazol se utilizaban para la prevención y el tratamiento, con resultados altamente efectivos, mientras que los arsenicales como la nitarsona se usaban para la prevención. Algunos de estos productos pueden ser utilizados con receta veterinaria en aves que no sean de abasto; sin embargo, esta clase de medicamentos está estrictamente prohibida para su uso extraoficial en animales de abasto en los EE. UU.

La desparasitación frecuente de los pollos con antihelmínticos benzimidazólicos ayuda a disminuir la exposición a los gusanos de H. gallinarum que transportan H. meleagridis.

Conceptos clave

  • Los pollos son un reservorio de Histomonas meleagridis y su vector Heterakis gallinarum.

  • Los huevos de H. gallinarum mantienen H. meleagridis en el ambiente.

  • Actualmente, no existen vacunas ni tratamientos aprobados para la histomoniasis.

Para más información

  • Blackhead disease in poultry. FDA Center for Veterinary Medicine. Actualizado el 13 de diciembre de 2019. Consultado el 30 de noviembre de 2023.